Un claro ejemplo de lo anterior es lo que refleja el análisis del SIMCE 2010 el cual evidenció
"falencias en el área de Matemáticas en los niveles de 8º Básico, donde un 62% no sabe la materia y/o no maneja conocimientos relativos a sexto básico, evidenciando un retraso de dos o más años" (http://www.mineduc.cl).
En este mismo sentido, el Ministro de Educación Joaquín Lavín reafirma lo anterior:
"Si se observa la tendencia de los últimos 10 años de los puntajes SIMCE, se aprecia que el ritmo de mejora es muy lento. Necesitamos un punto de inflexión que marque una nueva era en la educación chilena y si no cambiamos nos demoraremos más de 50 años en lograr los niveles de aprendizaje esperados"
Así, los factores que se han identificado como los posibles responsables de este bajo rendimiento, son los siguientes:
Falta de Equidad entre establecimientos particulares y subvencionados
Deficiente Atención Integral de los alumnos
Deficiencia en la adquisición de los conocimientos básicos entregados en los primeros años
Pero, si esto ya se ha confirmado y se sabe que tomará varios años poder intervenir la educación chilena para que esto se revierta, ¿Qué se podría hacer ahora con los alumnos que actualmente tienen estas falencias y están en la Educación Superior?
En este sentido es que el poner atención en los Estilos de Aprendizajes de estos alumnos podría darnos luces de cómo llegar a obtener una mayor participación y desarrollo de parte de ellos.
Algunos autores definen que se entinde por Estilos de Aprendizaje:
Dunn y otros (1989) :
“un conjunto de características personales, biológicas o del desarrollo, que hacen que un método, o estrategia de enseñar sea efectivo en unos estudiantes e inefectivo en otros”
DeBello (1990) :
“los Estilos de Aprendizaje son el modo en que las personas absorbemos o retenemos información”
Alonso otros (1994):
“los rasgos cognitivos, afectivos y fisiológicos que sirven como indicadores relativamente estables, de cómo los discentes perciben, interrelacionan y responden a sus ambientes de aprendizaje”
Cazau (2004 en www.Cazau, 2004) :
“se refiere al hecho de que cada persona utiliza su propio método o estrategias para aprender”
El poner atención en como aprenden los alumnos, en lo que enfocan su atención, en de qué forma se expresan, podría permitir regular la forma de crear instrumentos de evaluación válidos y acordes a su nivel de comunicación.
¿Acaso no debería ser este el centro de atención al momento de evaluar? Definir un escenario propicio, un contexto natural y conocido para el alumnos, permitiría que el instrumento en sí solo fuera el medio de comunicación entre el docente y el alumno, y no la barrera insalvable, como sucede en algunos casos.
Pero el esfuerzo no solo se queda en descubrir cuáles son los Estilos de Aprendizaje, sino también en cómo poder desarrollar herramientas que permitan adaptarse a estos estilos.
Una de las formas de tratar lo anterior es a través de lo que se conoce como Objetos de Aprendizajes (OA): "Un recurso digital que puede ser reusado para ayudar en el aprendizaje"(Wiley D, “Connecting learning objects to instructional design theory: A definition, a metaphor, and a taxonomy”. The Instructional Use of Learning Objects: Online Version. 2000.)
El cómo se creará este OA y cómo se incorporará a la metodología de enseñanza, serán puntos a comentar en otra de las publicaciones de este Blog.
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